• Que bonito lugar y que fotogénico. Le irían bien unas fotos en blanco y negro para sacarle mayor partido al granito. • Y claro, las playas cercanas... el marisco, el albariño...
Desde luego vaya colección de fotos de Galicia. Este horreo lo has conseguido con una luz muy poco típica de galicia. Cuanto color, cuanto azul y cuanto verde. Desde luego una gran instantánea. Por cierto soy de Baleares (Ibiza concretamente) aunque no me importaría ser de Canarias, ambos archipiélagos son maravillosos.
El típico secadero de productos de la tierra. Yo tengo fotos tambien de algunos de ellos. El paisaje del fondo es precioso, inspira paz. Gracias por compartirlo. Un beso
Hola, Ñoco, precioso, desde luego. Lo probé, el hórreo queda con más garra, pero el paisaje de atrás, el agua, sobre todo, no me acaba de convencer. Quizá cortando u otra que salga solo un hórreo, lo probaré. El marisco y el albariño, caray… y vino turbio, me traje para repartir para la familia y para cuando me entre la morriña, jajaja.
Hola Vicente. La verdad es que me vine con la tarjeta bien cargadita, jaja. Una se pone a afotar… Tuve mucha suerte con el tiempo, y eso que estaba previsto lluvia, pero todos los días salió el sol. Lo sé, uno de tus blogs se titula así “Ibiza”, además tengo muy buenos recuerdos de allí, estuve para el viaje de fin de estudios, por eso te dije que no te podías quejar (vives en Ibiza y visitaste Canarias), pero me comí “Ibiza” y por eso me quedó confuso, alguna vez me pasa :). A mí tampoco me importaría ser de ninguno de los dos archipiélagos, jeje, es difícil elegir entre paraísos.
Hola Merce, va a ser que síiii. Pues no, era uno de los lugares que no quería perderme; bellísimo. Me encantan los hórreos y antes de ir iba preocupada por verlos, si habría pocos o estarían en lugares remotos, etc, no me quería venir sin afotarlos y luego me los he encontrado hasta a pie de carretera. No sabía que había tantos y tan variados, un gusto para la vista y la cámara echando humo, jaja.
Hola, Juan. Pues sí, para eso los utilizan. Me ha sorprendido, y encantado, ver tantos. Es un pueblo precioso, declarado conjunto histórico-artístico, si puedes no te lo pierdas si vas por allí, merece la pena. Ah, y hazlo coincidir con la hora de comer, hay un montón de tabernas con muy buena pinta, a mí se me escapó esa oportunidad, llegué después de la hora de comer, por problemas en la carretera.
Hola, Javier. Llaman mucho la atención. Supongo que es porque los que vamos de fuera no los tenemos. Aparte, estéticamente, me fascinan, tienen un punto antiguo, auténtico y hasta melancólico, no sé, los de piedra, o los de tablas de maderas… He disfrutado fotografiándolos. Por eso he elegido este hórreo en particular, por ese fondo.
Mª Angeles y Jose. La verdad es que es un paisaje muy relajante. Como digo arriba, justo por eso elegí este hórreo para subir, aunque hay unas sombras ahí en el lateral que no me gustaban, pero me era imposible hacer mejor el encuadre, siempre hay algo en medio :).
Hola Juan Antonio. Ah, no me extraña, es una tierra para añorarla. ojalá puedas ir a quitarte esa añoranza pronto. Me alegro que te haya gustado esa foto.
HOLA MARGARITA; Muy bonitas vistas y preciosa fotografía,no tengo la suerte de conocer esas tierras,pero me encantaría. Margarita,gracias por interesarte por mi salud. Un abrazo. Rosa.
Hola, Rosa, qué sorpresa verte en mi casa. ¡Bienvenida! Me alegro que te haya gustado. A mí me pasaba igual, siempre quise ir a Galicia; me encanta toda la parte del norte, porque me gusta mucho la montaña y lo verde, y me faltaba Galicia y Asturias. A Asturias en otra ocasión, espero. Cuando puedas anímate a visitarla, es una tierra preciosa. Nada que agradecer, amiga. Espero y deseo que te restablezcas del todo pronto, ya lo verás.
Siempre me han fascinado los horreos por su antigüedad. Buen consejo el de tu frase, sobre todo en tiempos de crisis. La foto llena ta pantalla de luz preciosa. Gracias por tus generosos comentarios Feliz semana, Margarita
Hola Margarita, en primer lugar felicitarte por la bella foto de este hórreo, la luz es fantastica como todas las imagenes de Galicia que nos muestras, y que a mi por haber nacido en Lugo me producen a la vez morriña y gozo. Agradecerte tu acertado comentario, precisamente era lo que queria conseguir con el procesado, que se asemejara a un dibujo o a una litografia. Ver que tu impresión ha sido esa me llena de satisfacción. Bicos!!
Qué bonito y que preciosa la foto. Me encanta. Sabes que yo no vi ninguno desde la carretera hasta Lugo? Quizás estén por otras zonas. Los había visto cuando fuimos a Santiago hace muuuuchos años, tenía mi hija seis años, más o menos! Un abrazo y gracias por estar ahí. Conchi
Hola, Johnny. Y a mí, me encanta todo lo antiguo y lo rústico. Pues me temo que no le hemos hecho mucho caso a la frase, así nos va. Y eso de los ciclos es bien antiguo (los de arriba le tienen bien cogido el punto…), siete años de vacas gordas, siete de vacas flacas… pero no aprendemos, jajaja. Qué bueno que te gustó la foto.
Hola, Elena. Ah, eres de allí. No me extraña que tengas morriña, es una tierra preciosa, sí, supongo que se siente esa extraña mezcla cuando estás fuera de ella. Me alegro de que te haya gustado. Pues me alegro de haber acertado y que mi comentario te haya satisfecho, es lo que me transmitió tu foto, realmente espectacular. Gracias a ti también, por tan amable y cálido comentario. Un placer tu visita.
Raúl, caramba, menudo dilema nos has planteado… Aunque bien mirado no hay porqué escoger. Se puede hacer ambas cosas a la vez, jajaja. Gracias por pasar siempre con tan buen humor.
Bienvenido Valery. Es cierto, algunos tienen ese punto casi tétrico, pero no lo son. tienen un destino más grato, almacenar el grano, quesos, etc. Y son antiquísimo, parece que ya existían antes de que llegaran los romanos aquí, aunque otras fuentes dicen que lo trajeron ellos. Como sea, la verdad es que son unas construcciones fantásticas.
Gracias por la visita y tu comentario tan poético.
Hola, Conchi. Me alegro que te haya gustado. ¿No? Bueno, yo estuve mucho por Santiago, Pontevedra, algo menos por A Coruña, pero me quedó por ver Lugo, mi asignatura pendiente para la próxima vez. Desde luego es un lugar de los que me gustan volver.
¡Qué imagen más preciosa! Se derrama en armonía y en una calidez sobrecogedora. La encuentro una imagen que respira misticismo, insinuado tal vez por las cruces que coronan los extremos del techado... No sé por qué me recuerda las ermitas. Tranquilamente se podría meditar con esta imagen enfrente. Es una belleza.
Que foto tan bonita. A mi el hórreo siempre me ha recordado a una despensa, una despensa muy particular romántica y de "lujo",a los almacenes subterráneos de las hormigas... La pena que uno no puede llevarsela a su piso.
Hay algo de especial en construcciones como los horreos, este con las cruces me parece muy diferente a los que he visto en fotografías. Como te dije en mi blog hacía tiempo que no pasaba a hacerte una visita y me ha encantado poder disfrutar de tantas fotografías nuevas. El escrito de Hesse excelente y la foto. Un fuerte abrazo desde la isla amiga, Cris
Hola, Turke.¡Ah, y tú te derramas en Poesía! Gracias, amiga. A mí también me lo parece, tiene un halo místico, mágico, y transmiten serenidad. Pues no sé si será por las cruces, puede ser, por la piedra añosa, por los pilares, estar así casi en el aire, el caso es que desde niña me fascinan. Así que me disfruté mucho teniéndolos a la vista y poder fotografiarlos. Gracias por pasarte y derramar esas fragancias poéticas con que los dioses te bendijeron.
Bienvenida, Isaura. Bonitas palabras las que me dejas. Es cierto, también tienen un punto romántico. Creo que los enamorados se escondían para vivir sus amores secretos en estos hórreos. Me parece hermoso.
“La pena que uno no puede llevarsela a su piso”. Ah, pues yo lo hice, me llevé una réplica en pequeñito, está hecha de piedra, el tejado rojo y las cruces, con todos los detalles. Se parece mucho a la de la foto. Fíjate si me gustarán…
Hola, Ana, qué bueno verte en mi casa. Jajaja, vaya, y si no las ponen rápido a hacer dieta a la fuerza y todos a dos velas… Me alegro que te haya gustado. Y gracias por pasarte y desparramar tu simpatía y cariño.
Hola, Cris. Me alegra verte de nuevo. Totalmente de acuerdo contigo. Este tipo de construcciones, y otras igual de antiguas, tienen algo especial, a mí me resultan mágicas. Por fortuna quedan muchísimas. Incluso había casas tipo chalets que tenían una pequeña en el jardín, solo por adornar, como un símbolo representativo del lugar. Ojalá no se pierdan como otras tantas cosas con los tiempos modernos. Me alegro que tu visita haya sido placentera. Esa cita de Hesse es para ponérsela esos días que todo se ve medio negro. Un gusto la visita.
Hola, Paco. Totalmente de acuerdo; precioso de verdad. Y, sí, tiene ese puntito. Es una gozada pasear por él y, sobre todo, sentarse a degustar el marisco.
• Que bonito lugar y que fotogénico. Le irían bien unas fotos en blanco y negro para sacarle mayor partido al granito.
• Y claro, las playas cercanas... el marisco, el albariño...
• un besico
► CR ► LMA
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Bella vista con el horreo en primer término. Un abrazo
ResponderEliminarque bella foto
ResponderEliminary que sabia la frase
un gusto saludarte mario
Desde luego vaya colección de fotos de Galicia. Este horreo lo has conseguido con una luz muy poco típica de galicia. Cuanto color, cuanto azul y cuanto verde. Desde luego una gran instantánea. Por cierto soy de Baleares (Ibiza concretamente) aunque no me importaría ser de Canarias, ambos archipiélagos son maravillosos.
ResponderEliminarUn beso Margarita.
Uy aqui huele a Galicia... :)
ResponderEliminarLos horreos o cabaceiros de Combarro son famosos, y tambien la bella Combarro, preciosa.
No elegiste un mal lugar, eh? ;)
Bonita fotografia, llena de luz y azul.
Biquiños
El típico secadero de productos de la tierra. Yo tengo fotos tambien de algunos de ellos.
ResponderEliminarEl paisaje del fondo es precioso, inspira paz. Gracias por compartirlo.
Un beso
Bonita foto. No sé por que será pero los hórreos siempre son muy fotografiados.
ResponderEliminarEl paisaje de fondo le queda genial a la fotografía.
Un saludo.
Que bonito paisaje el que rodea a este Horreo, tiene un colorido magnifico.
ResponderEliminarBesos
Preciosa foto, me trae añoranzas.
ResponderEliminarSaludos.
Hola, Ñoco, precioso, desde luego. Lo probé, el hórreo queda con más garra, pero el paisaje de atrás, el agua, sobre todo, no me acaba de convencer. Quizá cortando u otra que salga solo un hórreo, lo probaré. El marisco y el albariño, caray… y vino turbio, me traje para repartir para la familia y para cuando me entre la morriña, jajaja.
ResponderEliminarBesos,
Margarita
Bienvenido Fernando, un pueblo precioso, no sabes dónde mirar. Está declarado conjunto histórico, con eso se dice todo.
ResponderEliminarUn abrazo,
Margarita
Hola Mario, me alegro que te guste el conjunto, porque está vez la frase me ha dado un poco la lata y todavía no estoy satisfecha del todo.
ResponderEliminarUn abrazo, amigo,
Margarita
Hola Vicente. La verdad es que me vine con la tarjeta bien cargadita, jaja. Una se pone a afotar… Tuve mucha suerte con el tiempo, y eso que estaba previsto lluvia, pero todos los días salió el sol. Lo sé, uno de tus blogs se titula así “Ibiza”, además tengo muy buenos recuerdos de allí, estuve para el viaje de fin de estudios, por eso te dije que no te podías quejar (vives en Ibiza y visitaste Canarias), pero me comí “Ibiza” y por eso me quedó confuso, alguna vez me pasa :). A mí tampoco me importaría ser de ninguno de los dos archipiélagos, jeje, es difícil elegir entre paraísos.
ResponderEliminarUn beso,
Margarita
Hola Merce, va a ser que síiii. Pues no, era uno de los lugares que no quería perderme; bellísimo. Me encantan los hórreos y antes de ir iba preocupada por verlos, si habría pocos o estarían en lugares remotos, etc, no me quería venir sin afotarlos y luego me los he encontrado hasta a pie de carretera. No sabía que había tantos y tan variados, un gusto para la vista y la cámara echando humo, jaja.
ResponderEliminarBiquiños, guapa,
Margarita
Hola, Juan. Pues sí, para eso los utilizan. Me ha sorprendido, y encantado, ver tantos. Es un pueblo precioso, declarado conjunto histórico-artístico, si puedes no te lo pierdas si vas por allí, merece la pena. Ah, y hazlo coincidir con la hora de comer, hay un montón de tabernas con muy buena pinta, a mí se me escapó esa oportunidad, llegué después de la hora de comer, por problemas en la carretera.
ResponderEliminarUn beso,
Margarita
Hola, Javier. Llaman mucho la atención. Supongo que es porque los que vamos de fuera no los tenemos. Aparte, estéticamente, me fascinan, tienen un punto antiguo, auténtico y hasta melancólico, no sé, los de piedra, o los de tablas de maderas… He disfrutado fotografiándolos. Por eso he elegido este hórreo en particular, por ese fondo.
ResponderEliminarUn abrazo,
Margarita
Mª Angeles y Jose. La verdad es que es un paisaje muy relajante. Como digo arriba, justo por eso elegí este hórreo para subir, aunque hay unas sombras ahí en el lateral que no me gustaban, pero me era imposible hacer mejor el encuadre, siempre hay algo en medio :).
ResponderEliminarUn besote,
Margarita
Hola Juan Antonio. Ah, no me extraña, es una tierra para añorarla. ojalá puedas ir a quitarte esa añoranza pronto. Me alegro que te haya gustado esa foto.
ResponderEliminarUn abrazo,
Margarita
HOLA MARGARITA; Muy bonitas vistas y preciosa fotografía,no tengo la suerte de conocer esas tierras,pero me encantaría.
ResponderEliminarMargarita,gracias por interesarte por mi salud.
Un abrazo.
Rosa.
Hola, Rosa, qué sorpresa verte en mi casa. ¡Bienvenida! Me alegro que te haya gustado. A mí me pasaba igual, siempre quise ir a Galicia; me encanta toda la parte del norte, porque me gusta mucho la montaña y lo verde, y me faltaba Galicia y Asturias. A Asturias en otra ocasión, espero. Cuando puedas anímate a visitarla, es una tierra preciosa. Nada que agradecer, amiga. Espero y deseo que te restablezcas del todo pronto, ya lo verás.
ResponderEliminarUn beso,
Margarita
Que foto mas bonita Margarita.
ResponderEliminarMe gusta mucho.
Besos.
Margarita as conseguido muy buena luz de ese bonito paisaje.
ResponderEliminarGracias por su amable comentario que pase un buen domingo
Un cordial saludo de José Ramón
Hola Margarita!!!...veo que sigues compartiendo preciosas imágenes, llenas de luz, color y nitidez...enhorabuena!!!
ResponderEliminarUn gran abrazo!!! ;)
ººº
ResponderEliminarMagnifico registo... gostei...
No sabían nada los que hacían estas maravillas arquitectónicas.
ResponderEliminarBuena semana.
Siempre me han fascinado los horreos por su antigüedad. Buen consejo el de tu frase, sobre todo en tiempos de crisis. La foto llena ta pantalla de luz preciosa.
ResponderEliminarGracias por tus generosos comentarios
Feliz semana, Margarita
Hola Margarita, en primer lugar felicitarte por la bella foto de este hórreo, la luz es fantastica como todas las imagenes de Galicia que nos muestras, y que a mi por haber nacido en Lugo me producen a la vez morriña y gozo.
ResponderEliminarAgradecerte tu acertado comentario, precisamente era lo que queria conseguir con el procesado, que se asemejara a un dibujo o a una litografia. Ver que tu impresión ha sido esa me llena de satisfacción. Bicos!!
¡Que bonitos los hórreos!
ResponderEliminar¡Y que buenas las Oreos!
Sobre todo con un Colacao...
Cuanta vida recoges en tu foto...
ResponderEliminarTe dejé algo en mi rincón...
Abrazos.
Parecen tumbas sobre el río, cruces solitarias mientras la marea fluvial baja.
ResponderEliminarSaludos
Valery
[Barcelona Daily Photo]
Qué bonito y que preciosa la foto. Me encanta.
ResponderEliminarSabes que yo no vi ninguno desde la carretera hasta Lugo? Quizás estén por otras zonas. Los había visto cuando fuimos a Santiago hace muuuuchos años, tenía mi hija seis años, más o menos!
Un abrazo y gracias por estar ahí.
Conchi
Hola, Jordy. Me alegro de que te haya gustado.
ResponderEliminarBesos!
Margarita
Hola, José Ramón. El día era muy luminoso, así que fue un regalo de la naturaleza. Tuve mucha suerte, hizo muy buen tiempo.
ResponderEliminarUn gran abrazo,
Margarita
Hola, Ignacio. Gracias mil, por tus amables palabras. Son bienvenidas, me animan a seguir practicando.
ResponderEliminarUn beso,
Margarita
Bienvenido Jota. Me alegro que te gustase. gracias por comentar.
ResponderEliminarUn abrazo,
Margarita
Hola, Logio. Son preciosos, ¿verdad? He disfrutado mucho viéndolos, porque siempre me llamaron mucho la atención.
ResponderEliminarUn gran abrazo,
Margarita
Hola, Johnny. Y a mí, me encanta todo lo antiguo y lo rústico. Pues me temo que no le hemos hecho mucho caso a la frase, así nos va. Y eso de los ciclos es bien antiguo (los de arriba le tienen bien cogido el punto…), siete años de vacas gordas, siete de vacas flacas… pero no aprendemos, jajaja. Qué bueno que te gustó la foto.
ResponderEliminarGracias a ti por estar.
Un beso,
Margarita
Hola, Elena. Ah, eres de allí. No me extraña que tengas morriña, es una tierra preciosa, sí, supongo que se siente esa extraña mezcla cuando estás fuera de ella. Me alegro de que te haya gustado. Pues me alegro de haber acertado y que mi comentario te haya satisfecho, es lo que me transmitió tu foto, realmente espectacular. Gracias a ti también, por tan amable y cálido comentario. Un placer tu visita.
ResponderEliminarBicos!
Margarita
Raúl, caramba, menudo dilema nos has planteado… Aunque bien mirado no hay porqué escoger. Se puede hacer ambas cosas a la vez, jajaja. Gracias por pasar siempre con tan buen humor.
ResponderEliminarUn abrazo grande,
Margarita
Sabela, la que hay allí, en aquella tierra hermosa. Solo he sido un testigo privilegiado.
ResponderEliminarGracias por ese premio-regalo, amiga. Ya lo tengo en el blog. Graciñas, como dirías tú.
Un beso,
Margarita
Bienvenido Valery. Es cierto, algunos tienen ese punto casi tétrico, pero no lo son. tienen un destino más grato, almacenar el grano, quesos, etc. Y son antiquísimo, parece que ya existían antes de que llegaran los romanos aquí, aunque otras fuentes dicen que lo trajeron ellos. Como sea, la verdad es que son unas construcciones fantásticas.
ResponderEliminarGracias por la visita y tu comentario tan poético.
Un abrazo,
Margarita
Hola, Conchi. Me alegro que te haya gustado. ¿No? Bueno, yo estuve mucho por Santiago, Pontevedra, algo menos por A Coruña, pero me quedó por ver Lugo, mi asignatura pendiente para la próxima vez. Desde luego es un lugar de los que me gustan volver.
ResponderEliminarGracias a ti, amiga.
Un beso,
Margarita
Que horreo más chulo... la foto genial.
ResponderEliminarSaludos y un abrazo.
Hola, Margarita:
ResponderEliminar¡Qué imagen más preciosa! Se derrama en armonía y en una calidez sobrecogedora.
La encuentro una imagen que respira misticismo, insinuado tal vez por las cruces que coronan los extremos del techado... No sé por qué me recuerda las ermitas. Tranquilamente se podría meditar con esta imagen enfrente. Es una belleza.
Te felicito.
Un besote.
Que foto tan bonita. A mi el hórreo siempre me ha recordado a una despensa, una despensa muy particular romántica y de "lujo",a los almacenes subterráneos de las hormigas... La pena que uno no puede llevarsela a su piso.
ResponderEliminarBesos.
Sí, porque las vacas gordas pueden ponerse a dieta en cualquier momento :-)
ResponderEliminarLa foto maravillosa, como siempre, qué te voy a decir.
Un beso, guapa!
Hola Margarita,
ResponderEliminarHay algo de especial en construcciones como los horreos, este con las cruces me parece muy diferente a los que he visto en fotografías. Como te dije en mi blog hacía tiempo que no pasaba a hacerte una visita y me ha encantado poder disfrutar de tantas fotografías nuevas. El escrito de Hesse excelente y la foto. Un fuerte abrazo desde la isla amiga,
Cris
muy, muy certero pensamiento.
ResponderEliminarun abrazo
Hola, Hiperión. Me alegro que te haya gustado la foto. El hórreo es muy bonito, tiene un halo mágico, ¿no? Gracias por pasar.
ResponderEliminarUn abrazo grande,
Margarita
Hola, Turke.¡Ah, y tú te derramas en Poesía! Gracias, amiga. A mí también me lo parece, tiene un halo místico, mágico, y transmiten serenidad. Pues no sé si será por las cruces, puede ser, por la piedra añosa, por los pilares, estar así casi en el aire, el caso es que desde niña me fascinan. Así que me disfruté mucho teniéndolos a la vista y poder fotografiarlos. Gracias por pasarte y derramar esas fragancias poéticas con que los dioses te bendijeron.
ResponderEliminarUn besazo,
Margarita
Bienvenida, Isaura. Bonitas palabras las que me dejas. Es cierto, también tienen un punto romántico. Creo que los enamorados se escondían para vivir sus amores secretos en estos hórreos. Me parece hermoso.
ResponderEliminar“La pena que uno no puede llevarsela a su piso”. Ah, pues yo lo hice, me llevé una réplica en pequeñito, está hecha de piedra, el tejado rojo y las cruces, con todos los detalles. Se parece mucho a la de la foto. Fíjate si me gustarán…
Gracias por la visita y el comentario.
Un beso,
Margarita
Hola, Ana, qué bueno verte en mi casa. Jajaja, vaya, y si no las ponen rápido a hacer dieta a la fuerza y todos a dos velas… Me alegro que te haya gustado. Y gracias por pasarte y desparramar tu simpatía y cariño.
ResponderEliminarUn besazo,
Margarita
Hola, Cris. Me alegra verte de nuevo. Totalmente de acuerdo contigo. Este tipo de construcciones, y otras igual de antiguas, tienen algo especial, a mí me resultan mágicas. Por fortuna quedan muchísimas. Incluso había casas tipo chalets que tenían una pequeña en el jardín, solo por adornar, como un símbolo representativo del lugar. Ojalá no se pierdan como otras tantas cosas con los tiempos modernos. Me alegro que tu visita haya sido placentera. Esa cita de Hesse es para ponérsela esos días que todo se ve medio negro. Un gusto la visita.
ResponderEliminarUn besazo, guapa,
Margarita
Bienvenido Reltih. Es para tenerlo en cuenta, sí. Gracias por tu visita y comentar.
ResponderEliminarUn abrazo,
Margarita
Combarro es un sitio espectacular. A mí me recuerda los puertos de antiguas películas de piratas.
ResponderEliminarSaludos
Hola, Paco. Totalmente de acuerdo; precioso de verdad. Y, sí, tiene ese puntito. Es una gozada pasear por él y, sobre todo, sentarse a degustar el marisco.
ResponderEliminarUn abrazo,
Margarita