¡Qué belleza! Descubres y compartes imágenes reveladas a través de lo sensitivo anudado a la filosofía y al buen quehacer artístico, en el que nada desarmoniza; en el que cada captura enlazada a un mensaje para el alma se une a las otras en un punto superior de Plenitud. Es por eso que es este un sitio blogger excepcional. Porque la mano que lo diseña descansa en los cojines de un espíritu Luminoso.
Querida Margarita: una vez más tomo prestada una obra tuya y la pongo en mi blog. Sabes que la naturaleza me apasiona, y con este paisaje me has enamorado. Un beso.
Hola, Servando. Me alegro de tu visita y de que te haya gustado. Gracias por ese rosario de piropos :), suben la moral y sirven de estimulo para seguir aprendiendo. Gracias.
Ay, Mónica, me dejaste levitando con ese comentario, jajaja. En serio, ni sé qué contestarte. Tienes un don para expresarte de forma mágica, estás tocada por la varita. Ya no me engañas más, eres un hada :) y tus palabras música celestial para mis oídos. Gracias, querida amiga. No sé si este blog será toodo eso, pero para mí es un gusto enfotar todo lo que nos regala la naturaleza, tratar de captar momentos, es relajante. Me apasiona. Así que mil gracias por pasar a verlas y volcar tu polvo de estreshas en esta casa.
Hola, Mario. La verdad es que tienen proverbios muy sabios, si que te dejan pensando. Me alegro que te guste el paisaje otoñal, el otoño tiene algo mágico, melancólico, es una estación muy bella.
Hola, Ángel. Pues la luz es que se filtraba tal cual, y según me contaron mis guías, que fueron mis primas, dicen que un mes antes, cuando todavía está las hojas en los árboles, la luz se ve como en un cuento. A ver si el año que viene voy en esas fechas.
Sol, me alegro que te guste la foto y el proverbio. La verdad es que al natural se veía precioso. Tuve suerte de ir pronto, porque luego el bosque se llenó como si fuera el metro, jaja.
Vaya, Juan, te inspiró esta estampa otoñal. Ya me pasé y leí tu bonito texto, ahora me pasaré a comentarte. Es que la naturaleza es hermosa de verdad, además darte un paseo y ver estas cosas como que te llenan de paz, y, fíjate, es un regalo. Me alegro que te haya gustado, amigo.
Hola, Americo. Este lugar es un bosque que hay junto a unos volcanes, inactivos, por suerte, en La Fageda d’en Jordà, en el Pirineo de Girona. Un lugar en plena naturaleza, precioso. Los proverbios orientales están llenos de sabiduría, no sé si debiéramos aprender de su filosofía.
Hola, Merce. Si, esta es muy otoñal, jaja. Ay, cachis, ya verás como en algún momento deja de llover y nos sorprendes con una de tus estupendas fotos. Aunque la lluvia también deja cosas muy bonitas que enfotar :) y vives en un lugar precioso, al que tengo muchas ganas de ir. A ver este verano.
Margarita, la foto es preciosa, hasta me gusta para pintar un cuadro!! jaja. Y es que tus paseos te llevan por rincones maravillosos, menos mal que siempre llevas la cámara! Anímate a participar en algún concurso. Te mandé un correo con uno sobre atardeceres. Las citas, buenísimas, como siempre! Un abrazo grandeeeeeeee y feliz fin de semana. Conchi
Hola, Conchi, me alegro que te guste la foto. Ah, pues si quieres tómala de guía, amiga, seguro que te queda estupendo ese cuadro y para mí será un gusto que te hayas inspirado en una foto mía. Ah, sí, la cámara es otro apéndice más, casi va atornillado a mi mano, jaja. Esta afición también me sirve de excusa para ir a hacer fotos nuevas.
Gracias por pasarme lo del concurso, ya mandé una foto. Te contestaré al mail, es que estos días he andado algo liada. Gracias por estar siempre ahí.
Hola, Otra vez…, Ay, ¡qué buena pregunta! Supongo que las oportunidades perdidas se van, se presentarán otras, y a otros, pero no serán esas mismas. ¿A dónde irán…?
“Hay tres cosas que nunca vuelven atrás: la palabra pronunciada, la flecha lanzada y la oportunidad perdida”. Cuanta verdad!!!! por eso hay que disfrutar de los pequeños momentos que nos da la vida para que luego no sean "oportunidades perdidas" de disfrute. Cuidar lo que decimos es fundamental porque con la palabra podemos construir puentes que nos unan o muros que nos separen; y la flecha lanzada sin ser necesaria puede ser lo que rompa una relación que pudo ser fructífera. Me encantan las fotos que publicas. Hermosas. Un cariñoso saludo
Hola, Belkis. Estoy de acuerdo contigo, además en las cosas pequeñas y sencillas es donde está lo mejor de la vida, lo que realmente importa.
¡Es cierto! Cuántas relaciones se habrán ido a pique por esto que dices de forma magistral…
“Cuidar lo que decimos es fundamental porque con la palabra podemos construir puentes que nos unan o muros que nos separen; y la flecha lanzada sin ser necesaria puede ser lo que rompa una relación que pudo ser fructífera.”
Me alegro que te gusten mis fotos. Gracias por la visita y por este interesante comentario. Me gustaron mucho tus palabras.
Ah!
ResponderEliminarUna foto impresionante!
Llena de detalles, atractiva, hermosa!
Saludos!
¡Qué belleza! Descubres y compartes imágenes reveladas a través de lo sensitivo anudado a la filosofía y al buen quehacer artístico, en el que nada desarmoniza; en el que cada captura enlazada a un mensaje para el alma se une a las otras en un punto superior de Plenitud. Es por eso que es este un sitio blogger excepcional. Porque la mano que lo diseña descansa en los cojines de un espíritu Luminoso.
ResponderEliminarUn abrazo admirado.
Un Exquisito paisaje otoñal.
ResponderEliminarlos chinos y su filosofía siempre me mueven a la reflexión.
un gusto pasar por aquí.
hasta pronto mario
Me gusta la toma, con una luz suave que filtra todo el color.
ResponderEliminarUn abrazo
La imagen exquisita, cuánto color, cuñánta belleza. Y el proverbio que la acompaña, qué sabiduría...
ResponderEliminarCariños!
Querida Margarita: una vez más tomo prestada una obra tuya y la pongo en mi blog. Sabes que la naturaleza me apasiona, y con este paisaje me has enamorado. Un beso.
ResponderEliminarEl sitio que muestra la fotografía es realmente envidiable, la sabiduría del proverbio es infinita.
ResponderEliminarSaludos sinceros.
No te imaginas la envidia que me estais dando todos con el otoño jajajaja, es que aqui no para de llover y no hay manera de poder salir :)
ResponderEliminarMuy bonita, llena de otoño por todas partes :)
Biquiños
Hola, Servando. Me alegro de tu visita y de que te haya gustado. Gracias por ese rosario de piropos :), suben la moral y sirven de estimulo para seguir aprendiendo. Gracias.
ResponderEliminarUn abrazo,
Margarita
Ay, Mónica, me dejaste levitando con ese comentario, jajaja. En serio, ni sé qué contestarte. Tienes un don para expresarte de forma mágica, estás tocada por la varita. Ya no me engañas más, eres un hada :) y tus palabras música celestial para mis oídos. Gracias, querida amiga. No sé si este blog será toodo eso, pero para mí es un gusto enfotar todo lo que nos regala la naturaleza, tratar de captar momentos, es relajante. Me apasiona. Así que mil gracias por pasar a verlas y volcar tu polvo de estreshas en esta casa.
ResponderEliminarUn besote grande,
Margarita
Hola, Mario. La verdad es que tienen proverbios muy sabios, si que te dejan pensando. Me alegro que te guste el paisaje otoñal, el otoño tiene algo mágico, melancólico, es una estación muy bella.
ResponderEliminarSiempre encantada de recibirte.
Un abrazo,
Margarita
Hola, Ángel. Pues la luz es que se filtraba tal cual, y según me contaron mis guías, que fueron mis primas, dicen que un mes antes, cuando todavía está las hojas en los árboles, la luz se ve como en un cuento. A ver si el año que viene voy en esas fechas.
ResponderEliminarGracias por pasar y comentar.
Un abrazo,
Margarita
Sol, me alegro que te guste la foto y el proverbio. La verdad es que al natural se veía precioso. Tuve suerte de ir pronto, porque luego el bosque se llenó como si fuera el metro, jaja.
ResponderEliminarGracias por pasarte.
Un beso,
Margarita
Vaya, Juan, te inspiró esta estampa otoñal. Ya me pasé y leí tu bonito texto, ahora me pasaré a comentarte. Es que la naturaleza es hermosa de verdad, además darte un paseo y ver estas cosas como que te llenan de paz, y, fíjate, es un regalo. Me alegro que te haya gustado, amigo.
ResponderEliminarUn beso,
Margarita
Hola, Americo. Este lugar es un bosque que hay junto a unos volcanes, inactivos, por suerte, en La Fageda d’en Jordà, en el Pirineo de Girona. Un lugar en plena naturaleza, precioso. Los proverbios orientales están llenos de sabiduría, no sé si debiéramos aprender de su filosofía.
ResponderEliminarGracias por la visita.
Un abrazo,
Margarita
Hola, Merce. Si, esta es muy otoñal, jaja. Ay, cachis, ya verás como en algún momento deja de llover y nos sorprendes con una de tus estupendas fotos. Aunque la lluvia también deja cosas muy bonitas que enfotar :) y vives en un lugar precioso, al que tengo muchas ganas de ir. A ver este verano.
ResponderEliminarGracias por pasar y biquiños para ti, también.
Margarita
Margarita, la foto es preciosa, hasta me gusta para pintar un cuadro!! jaja. Y es que tus paseos te llevan por rincones maravillosos, menos mal que siempre llevas la cámara!
ResponderEliminarAnímate a participar en algún concurso. Te mandé un correo con uno sobre atardeceres.
Las citas, buenísimas, como siempre!
Un abrazo grandeeeeeeee y feliz fin de semana.
Conchi
Bela fotografia...bela suavidade...Espectacular....
ResponderEliminarUm abraço
y esa oportunidad que ya no esta, con quien estará?
ResponderEliminarHola, Conchi, me alegro que te guste la foto. Ah, pues si quieres tómala de guía, amiga, seguro que te queda estupendo ese cuadro y para mí será un gusto que te hayas inspirado en una foto mía. Ah, sí, la cámara es otro apéndice más, casi va atornillado a mi mano, jaja. Esta afición también me sirve de excusa para ir a hacer fotos nuevas.
ResponderEliminarGracias por pasarme lo del concurso, ya mandé una foto. Te contestaré al mail, es que estos días he andado algo liada. Gracias por estar siempre ahí.
Un beso,
Margarita
Hola, Fernando, me alegro que te guste la foto. Bueno, sí, los tonos en el otoño son bastante cálidos, un buen regalo de la naturaleza.
ResponderEliminarGracias por la visita. Un abrazo,
Margarita
Hola, Otra vez…, Ay, ¡qué buena pregunta! Supongo que las oportunidades perdidas se van, se presentarán otras, y a otros, pero no serán esas mismas. ¿A dónde irán…?
ResponderEliminarGracias por pasarte y dejar esta reflexión :)
Un abrazo,
Margarita
“Hay tres cosas que nunca vuelven atrás: la palabra pronunciada, la flecha lanzada y la oportunidad perdida”. Cuanta verdad!!!! por eso hay que disfrutar de los pequeños momentos que nos da la vida para que luego no sean "oportunidades perdidas" de disfrute. Cuidar lo que decimos es fundamental porque con la palabra podemos construir puentes que nos unan o muros que nos separen; y la flecha lanzada sin ser necesaria puede ser lo que rompa una relación que pudo ser fructífera. Me encantan las fotos que publicas. Hermosas.
ResponderEliminarUn cariñoso saludo
Hola, Belkis. Estoy de acuerdo contigo, además en las cosas pequeñas y sencillas es donde está lo mejor de la vida, lo que realmente importa.
ResponderEliminar¡Es cierto! Cuántas relaciones se habrán ido a pique por esto que dices de forma magistral…
“Cuidar lo que decimos es fundamental porque con la palabra podemos construir puentes que nos unan o muros que nos separen; y la flecha lanzada sin ser necesaria puede ser lo que rompa una relación que pudo ser fructífera.”
Me alegro que te gusten mis fotos. Gracias por la visita y por este interesante comentario. Me gustaron mucho tus palabras.
Un abrazo,
Margarita