Hola, Margarita, de nuevo maravillado ante tu arte. Es una instantánea genial, preciosa.Y la frase que la acompaña también.
Cuando yo era un niño y estaba interno en un colegio de monjas en la sierra de Guadarrama entró una lechuza en el dormitorio y cerramos las ventanas y la capturamos. Era la primera vez que veía un ave tan grande y tan bonita. Estuvimos casi toda la noche con ella, observándola y acariciando su plumaje. Hasta que la celadora, Sor Rocío, se despertó por el bullicio y vino con cara de mala ostia y tras repartir a diestro y siniestro algunas bofetadas la echó a volar.
Por cierto, si le hubiésemos puesto un velo y gafas a la lechuza, sería clavadita a la monja. Ahora las veo a menudo volar por el parque de la bodega de Osborne, las farolas reslatan su figura con las grandes alas desplegadas. Siempre me ha intrigado conocer la diferencia entre un búho y la lechuza. ¡Y es que tiene tela la información de que dispongo! Miro en el Diccionario Enciclopédico Larrouse, edición 2008, y leo:
1ª, Búho, del latín, bufo. Ave rapaz nocturna de ojos grandes colocados en la parte anterior de la cabeza, pico curvo, garras afiladas y fuertes que se alimenta de roedores e insectos. Entre los búhos destacan el búho real, el búho nival y el búho chico. 2ª, Persona huraña.
Lechuza. Del latín noctua, Ave rapaz nocturna de cabeza redonda y discos faciales, pico corto y encorvado en la punta. La lechuza, ave consagrada a la diosa Atenea es símbolo de la ciudad griega de Atenas. Familia de los estrígidos y los tritonitos. Pues la verdad, me quedo a oscuras, igual que antes. Porqque tiene tela el que ha escrito eso: ojos grandes colocados en la parte anterior de la cabeza ¿Dónde esperaba que tuviera los ojos, en la espalda? Te felicito una vez más por la belleza de tus fotos. Un beso
La sabiduría, eternamente buscada por el hombre, tiene sus símbolos a trabes del tiempo y de las culturas. pero creo que nunca lograremos alcanzarla... en fin forma parte de las muchas incógnitas pendientes por resolver. La foto es bella refleja toda la majestuosidad de la lechuza. Un gusto visitar tu blog
Me alegro que te haya gustado, Juan. Una enternecedora anécdota, amigo, que te agradezco que la compartas aquí. Imagino lo que debió ser para unos niños, con todo lo que habías pasado en aquella época, una distracción así, casi algo así como la visita de un ser mágico. Son preciosas estas aves. Jajaja, con lo de la monja me sacaste una sonrisa, menos mal que Sor “Lechuza” no te oye.
Bueno, pues te agradezco la información, no te creas que a mí tampoco me quedaba claro, hasta que fui a ver una demostración de aves rapaces. Te diré que me armé de valor, pues tengo fobia a los pájaros, y en la demostración volaban entre el público. Nos dijeron que no podíamos movernos para no llamar la atención de los animalitos, ni te digo, que yo me porté de lo más bien, casi ni respiro cuando pasó rozándome una de sus alas un buitre, más grande que yo, no te exagero. Luego tuve la oportunidad de fotografiarlas ya en sus lugares, de allí es esta foto. Y también fotografié una lechuza, a los buitres, y al águila ese americano, tan famoso. Pero el buho, me robó el corazón, y eso que él se mostró esquivo todo el rato, ni una vez quiso posar, de ahí la frase, porque si yo me iba para donde estaba mirando, giraba la cara, jajaja.
Bueno, amigo, gracias por la visita y esta pequeña charla.
Hola, Mario, qué bien verte por mi blog, compañero. Ah, estoy de acuerdo contigo, qué razón tenía ese hombre “solo sé que no sé nada” y cuanto más creemos avanzar en el camino, más cuenta nos damos de todo lo que nos queda por saber, todavía. Pero creo que eso es parte de la hermosura de este mundo, los misterios, imagina si todo lo supiéramos, perderíamos muchas cosas, la curiosidad, la satisfacción de los descubrimientos, nos haríamos ociosos, qué sé yo…
Me alegro que te gustase la foto. Y regresa cuando quieras, es un gusto recibir tus visitas.
Hola, Cris, una alegría verte. Sí, todas las fotos que están y que subo al blog son mías, incluidas la cabecera y las de la columna lateral. De momento solo he subido mis fotos, es como mi álbum de fotos que comparto con vosotros. Que bien que te gustase. Gracias por la visita, siempre es un gusto recibirte.
Hola Margarita. É realmente uma fotografia bonita, um retrato bem enquadrado, com belas cores, é uma ave muito bela, os meus parabéns por esta foto, maravilhosa, tambem gostaria um dia de fotografar estas aves, são exemplares muito bonitos, e a frase que acompanha a foto esta bem escolhida, são palavras sábias que devemos guardar. Despeço-me com amizade, e espero que continue com a sua paixão fotográfica, obrigado por partilhar estes momentos. Tudo de bom, com os meus cumprimentos, até breve. Un abrazo.
Hola, José Filipe, este Búho estaba en una exposición y demostración que realizan en el Monasterio de Piedra, de Zaragoza. Tienes razón, había otras aves que también fotografié pero este Búho me enamoró nada más verlo, y estuve mi buen rato para ver si se dejaba fotografiar de frente, pero no hubo manera, se mostró esquivo. Aún así quedó muy guapo en la foto, muy digno y elegante él.
Me alegro que tanto la foto como la frase te hayan gustado. Y, bueno, este tipo de aves fotografiarlas en libertad es bastante complicado, aunque es donde debieran estar, pero… Ojalá un día tengas la oportunidad de fotografiar uno de estos ejemplares.
Gracias por tus visitas y tus interesantes comentarios, amigo. Te envío un abrazo,
Hola, Margot de la Cascade: ¡menos mal que leí los comentarios anteriores! Te iba a felicitar por lo bien que saliste, claro que para qué querías ese abrigo de plumas, si por ashá es verano, che. JAJA. (Perdona, es unos de mis intervalos deslúcidos que me asaltan muy de vez en cuando...)
No, hablando en serio, no comprendo cómo puedes lograr estas imágenes tan rotundas; lo tuyo es un despiadado alarde de estética visual; invita al aplauso cerrado con la boca abierta de estupor. Esta foto, desprende belleza y seducción, si hasta parece que el sabio bicho que te ha servido de musa está por soltar una cátedra.
Te felicito.
PD: Por otra parte, este blog, aprovecho a decirte, es descontracturante.
Una se da una pasadita y queda como fresca como una flor, nuevecita para cargar el equipaje que ha olvidado en la entrada.
Mónica, querida, nada que perdonar, divina… Viste? Shó que siempre ando quejándome de que no soy fotogénica, jaja. Sí, he de reconocer que tiene cierta retirada a mí, obvio que eres una gran observadora, y te diste cuenta de que acá no vamos con abrigo en estos momentos, si no la confusión estaba más que justificada, jajajaja. La madre que te… Mira, si serás… ejem, ya te reprendo en privado, che.
Ay, bueno, si cuando hablas en serio te temo… Uff, caramba, lo tuyo es demasiado, amigota. No, si te digo que casi agradezco la confusión con el bichito, che. Un gustazo leer estas cosillas, te digo. Alimento para el alma.
“No, hablando en serio, no comprendo cómo puedes lograr estas imágenes tan rotundas; lo tuyo es un despiadado alarde de estética visual; invita al aplauso cerrado con la boca abierta de estupor. Esta foto, desprende belleza y seducción, si hasta parece que el sabio bicho que te ha servido de musa está por soltar una cátedra”.
¿descontracturante? ¿nuevecita? Jeje, si ahora resulta que una visita a mi blog te aporta más relax que una sesión en el SPA. Ya hablaremos de eso, jajaja. ¡GRACIAS! Tus comentarios siempre son una maravilla, cuando no destila poesía, destila humor, y en muchas ocasiones ambos; eres una genia.
Hola, Margarita, de nuevo maravillado ante tu arte. Es una instantánea genial, preciosa.Y la frase que la acompaña también.
ResponderEliminarCuando yo era un niño y estaba interno en un colegio de monjas en la sierra de Guadarrama entró una lechuza en el dormitorio y cerramos las ventanas y la capturamos. Era la primera vez que veía un ave tan grande y tan bonita. Estuvimos casi toda la noche con ella, observándola y acariciando su plumaje. Hasta que la celadora, Sor Rocío, se despertó por el bullicio y vino con cara de mala ostia y tras repartir a diestro y siniestro algunas bofetadas la echó a volar.
Por cierto, si le hubiésemos puesto un velo y gafas a la lechuza, sería clavadita a la monja.
Ahora las veo a menudo volar por el parque de la bodega de Osborne, las farolas reslatan su figura con las grandes alas desplegadas. Siempre me ha intrigado conocer la diferencia entre un búho y la lechuza. ¡Y es que tiene tela la información de que dispongo! Miro en el Diccionario Enciclopédico Larrouse, edición 2008, y leo:
1ª, Búho, del latín, bufo. Ave rapaz nocturna de ojos grandes colocados en la parte anterior de la cabeza, pico curvo, garras afiladas y fuertes que se alimenta de roedores e insectos.
Entre los búhos destacan el búho real, el búho nival y el búho chico.
2ª, Persona huraña.
Lechuza. Del latín noctua, Ave rapaz nocturna de cabeza redonda y discos faciales, pico corto y encorvado en la punta.
La lechuza, ave consagrada a la diosa Atenea es símbolo de la ciudad griega de Atenas. Familia de los estrígidos y los tritonitos.
Pues la verdad, me quedo a oscuras, igual que antes. Porqque tiene tela el que ha escrito eso: ojos grandes colocados en la parte anterior de la cabeza
¿Dónde esperaba que tuviera los ojos, en la espalda?
Te felicito una vez más por la belleza de tus fotos. Un beso
La sabiduría, eternamente buscada por el hombre, tiene sus símbolos a trabes del tiempo y de las culturas.
ResponderEliminarpero creo que nunca lograremos alcanzarla... en fin forma parte de las muchas incógnitas pendientes por resolver.
La foto es bella refleja toda la majestuosidad de la lechuza.
Un gusto visitar tu blog
hasta pronto mario
Buena frase y MARAVILLOSA foto Margarita, ¿es tuya? es increíble, me encanta, mi enhorabuena´. Un abrazo,
ResponderEliminarCris
Olá, excelente fotografia....
ResponderEliminarUm abraço
Me alegro que te haya gustado, Juan. Una enternecedora anécdota, amigo, que te agradezco que la compartas aquí. Imagino lo que debió ser para unos niños, con todo lo que habías pasado en aquella época, una distracción así, casi algo así como la visita de un ser mágico. Son preciosas estas aves. Jajaja, con lo de la monja me sacaste una sonrisa, menos mal que Sor “Lechuza” no te oye.
ResponderEliminarBueno, pues te agradezco la información, no te creas que a mí tampoco me quedaba claro, hasta que fui a ver una demostración de aves rapaces. Te diré que me armé de valor, pues tengo fobia a los pájaros, y en la demostración volaban entre el público. Nos dijeron que no podíamos movernos para no llamar la atención de los animalitos, ni te digo, que yo me porté de lo más bien, casi ni respiro cuando pasó rozándome una de sus alas un buitre, más grande que yo, no te exagero. Luego tuve la oportunidad de fotografiarlas ya en sus lugares, de allí es esta foto. Y también fotografié una lechuza, a los buitres, y al águila ese americano, tan famoso. Pero el buho, me robó el corazón, y eso que él se mostró esquivo todo el rato, ni una vez quiso posar, de ahí la frase, porque si yo me iba para donde estaba mirando, giraba la cara, jajaja.
Bueno, amigo, gracias por la visita y esta pequeña charla.
Un beso,
Margarita
Hola, Mario, qué bien verte por mi blog, compañero. Ah, estoy de acuerdo contigo, qué razón tenía ese hombre “solo sé que no sé nada” y cuanto más creemos avanzar en el camino, más cuenta nos damos de todo lo que nos queda por saber, todavía. Pero creo que eso es parte de la hermosura de este mundo, los misterios, imagina si todo lo supiéramos, perderíamos muchas cosas, la curiosidad, la satisfacción de los descubrimientos, nos haríamos ociosos, qué sé yo…
ResponderEliminarMe alegro que te gustase la foto. Y regresa cuando quieras, es un gusto recibir tus visitas.
Un abrazo,
Margarita
Hola, Cris, una alegría verte. Sí, todas las fotos que están y que subo al blog son mías, incluidas la cabecera y las de la columna lateral. De momento solo he subido mis fotos, es como mi álbum de fotos que comparto con vosotros.
ResponderEliminarQue bien que te gustase. Gracias por la visita, siempre es un gusto recibirte.
Un abrazo,
Margarita
Hola, Fernando, encantada de recibirte. Me alegro que te haya gustado la foto. Ahora iré a echar un ojo a tu blog.
ResponderEliminarGracias por la visita y el comentario. Vuelve cuando quieras.
Un abrazo,
Margarita
Hola Margarita.
ResponderEliminarÉ realmente uma fotografia bonita, um retrato bem enquadrado, com belas cores, é uma ave muito bela, os meus parabéns por esta foto, maravilhosa, tambem gostaria um dia de fotografar estas aves, são exemplares muito bonitos, e a frase que acompanha a foto esta bem escolhida, são palavras sábias que devemos guardar.
Despeço-me com amizade, e espero que continue com a sua paixão fotográfica, obrigado por partilhar estes momentos.
Tudo de bom, com os meus cumprimentos, até breve.
Un abrazo.
José Filipe 25/08/2009
Hola, José Filipe, este Búho estaba en una exposición y demostración que realizan en el Monasterio de Piedra, de Zaragoza. Tienes razón, había otras aves que también fotografié pero este Búho me enamoró nada más verlo, y estuve mi buen rato para ver si se dejaba fotografiar de frente, pero no hubo manera, se mostró esquivo. Aún así quedó muy guapo en la foto, muy digno y elegante él.
ResponderEliminarMe alegro que tanto la foto como la frase te hayan gustado. Y, bueno, este tipo de aves fotografiarlas en libertad es bastante complicado, aunque es donde debieran estar, pero… Ojalá un día tengas la oportunidad de fotografiar uno de estos ejemplares.
Gracias por tus visitas y tus interesantes comentarios, amigo.
Te envío un abrazo,
Margarita
Hola, Margot de la Cascade: ¡menos mal que leí los comentarios anteriores! Te iba a felicitar por lo bien que saliste, claro que para qué querías ese abrigo de plumas, si por ashá es verano, che. JAJA. (Perdona, es unos de mis intervalos deslúcidos que me asaltan muy de vez en cuando...)
ResponderEliminarNo, hablando en serio, no comprendo cómo puedes lograr estas imágenes tan rotundas; lo tuyo es un despiadado alarde de estética visual; invita al aplauso cerrado con la boca abierta de estupor. Esta foto, desprende belleza y seducción, si hasta parece que el sabio bicho que te ha servido de musa está por soltar una cátedra.
Te felicito.
PD: Por otra parte, este blog, aprovecho a decirte, es descontracturante.
Una se da una pasadita y queda como fresca como una flor, nuevecita para cargar el equipaje que ha olvidado en la entrada.
Un abrazo grande.
Mónica, querida, nada que perdonar, divina… Viste? Shó que siempre ando quejándome de que no soy fotogénica, jaja. Sí, he de reconocer que tiene cierta retirada a mí, obvio que eres una gran observadora, y te diste cuenta de que acá no vamos con abrigo en estos momentos, si no la confusión estaba más que justificada, jajajaja. La madre que te… Mira, si serás… ejem, ya te reprendo en privado, che.
ResponderEliminarAy, bueno, si cuando hablas en serio te temo… Uff, caramba, lo tuyo es demasiado, amigota. No, si te digo que casi agradezco la confusión con el bichito, che. Un gustazo leer estas cosillas, te digo. Alimento para el alma.
“No, hablando en serio, no comprendo cómo puedes lograr estas imágenes tan rotundas; lo tuyo es un despiadado alarde de estética visual; invita al aplauso cerrado con la boca abierta de estupor. Esta foto, desprende belleza y seducción, si hasta parece que el sabio bicho que te ha servido de musa está por soltar una cátedra”.
¿descontracturante? ¿nuevecita? Jeje, si ahora resulta que una visita a mi blog te aporta más relax que una sesión en el SPA. Ya hablaremos de eso, jajaja.
¡GRACIAS! Tus comentarios siempre son una maravilla, cuando no destila poesía, destila humor, y en muchas ocasiones ambos; eres una genia.
Un besote,
Margot de la Cascade ;)