“Todos revueltos: instrumentos y
animales.
¡No les vamos a defraudar, éste es
el Bestiario Musical!
Y, ya sin más dilación que empiece
la función!”
animales.
¡No les vamos a defraudar, éste es
el Bestiario Musical!
Y, ya sin más dilación que empiece
la función!”
¡Ha llegado el Carnaval!
Fernando Palacios
Inspirado en la obra musical “El carnaval de los animales” de Camille Saint-Saëns
Hola Margarita!!!
ResponderEliminar¡Qué fabulosa y variopinta fotografía! Tantos animales revueltos, de todas formas y colores... Me pregunto yo, ¿acaso no ese burro (ehem... bueno, para ser justos, y dejar de lado toda especulación sexista, bien podría ser también una burra)ocupa demasiado espacio entre tantos animalitos de corral?
¡Hay que ver las cosas que suceden en el mundo! Mientras unos abarcan en exceso, otros se dejan abarcar. Lo que me gusta es la sonrisota de la abeja... se ve que anda re-contenta entre tanta compañía -bueh... sospecho que es la abeja reina, por el tamaño, ¿viste qué observador?
Y los enanitos esos, de sombreros amarillos, también se ven contentos... ¡Eso me agrada! Todos contentos y felices, juntitos y en armonía, y en medio de todos, la burra.
Es en verdad, una obra carnavalesca... ¿qué te digo, amiga? ¡Me he reído de lo lindo!
Gracias por alegrarme el día :D
Un abrazo grande. Nos leemos.
Laocoonte.
P.S. Igual y vi abeja, en donde había mariposa, ¿eh? Jejejeje. Y claro... también hay unos mansos corderitos, escondidos, como corresponde, bajo la mesa. Me recuerda a esa parte de la pelicula de "Fantasía" donde, ante la ira de Zeus, todos corren a refugiarse donde pueden.
Lao, ¡cuánto bueno por aquí…!
ResponderEliminar¿Te pareció variopinta? Bueno, sí, es cierto, hay fauna para todos los gustos… quizá demasiada, por lo mismo que dices tú. Me quedé alucinada con tu comentario, hiciste un estupendo análisis de mi fotografía. Qué visión la tuya y qué imaginación. ¡Me encantó!
Es cierto, el burro (o burra, que tienes razón, no sabemos de qué sexo es…) destaca en medio de los demás animalitos porque ocupa mucho más espacio. Un burro es más grande que una ovejita, por ejemplo, pero quizá que sí ande un poco desproporcionado el asunto. Pero claro, el burro allí en medio y abarcando tanto, los demás animalitos se ven un poco arrinconados y, sí, no parece importarles y se les ve de lo más feliz. Aunque hay algunas gallinas se subieron al tronco para respirar un poco.
Jajaja, tú análisis hizo que me fijara más en detalles en los que ni había reparado. Si te fijas por ahí, pasando muy inadvertido, hay un pato/a negro/a, o tal vez sea un cuervo (o cuerva que no vamos a ser machistas ahora. Aunque el sexo cuesta mucho definirlo en algunas especies…), al lado de las ovejitas y bajo el burro (o burra), pegadito a sus patas, entre medio de dos patitos/as amarillos. Bueno, como es tan oscuro/a pasa inadvertido.
Ah, yo diría que es una abeja, no, no me parece mariposa :). O abejo, jeje, porque no sé si por allí pudisteis ver la serie de dibujos animados “la abeja Maya”, me recordó a Willy. Bueno, en el mundo de la imaginación todo es posible, claro, aunque se dice que la realidad supera la ficción.
Bueno, jajaja, no nos falta material para hacer una fábula con los que hay en esa foto. ¿Te animas?
Es cierto, eres muy observador, amigo. El día que la hice no podía imaginar…¡qué iba a imaginar que un día un amigo haría un comentario de este nivel a mi foto! Tan ajustado y simpático. No sabes lo que lo he disfrutado y hasta me sacaste más de una sonrisa. También me alegraste el día. Gracias, amigo.
Un gusto tenerte por aquí.
Besos,
Margarita
Hola, Margarita. Pero che, qué bonito corral. Muy buena fotografía!
ResponderEliminarAunque si he de serte sincera, me dan un poco de pena esos animalitos amontonados en un lugar tan reducido. Aunque se los ve conformes. Tal vez, obedezca a que se conocen hace tiempo, o a que no son conscientes de su acorralamiento. O ambas cosas.
Me llama la atención la mirada del burro o ¿Burra? es que me recuerda la mirada de un zorro; como que no encaja con la mirada de los burros que conozco; temo entonces por los otros animalitos, sobre todo, las gallinas y patitos, que tan confiadamente se quedan allicito, al ladito del burro... Es que he escuchado tantas historias del zorro que recurre a todo tipo de astucias para asaltar el corral...
A prmera vista, me causan ternura los corderitos; fíjate, se ve allí un papá cordero y tres pequeñines, tan inocentones, que no sé porqué, pero a segunda vista, se me hacen un grupete entre simpático y sospechoso, como...los cuates esos del cartel de Sinaloa,has visto, que andan enfierrados pero se mimetizan en el contexto, a fin de cerrar negocios o ... ajustar cuentas. De todos modos, gracias a dios se ve que son corderos y lobos con piel de, pero ... por algo la gallina más grande se ha colocado a buen resguardo, esa no es tonta, ¿eh? O tal vez, desde allí arriba, ella ve un horizonte que obviamente, a ras del piso no puede ni adivinarse. Como sea, tal vez yerro, y simplemente es la gallina en jefe. No me gusta esa gallina allí. Está alejada de sus propias congéneres, se ha colocado a resguardo y al mismo tiempo, tiene una perspectiva genérica bien completa, a diferencia del resto, que solo puede acceder a vistas parciales. ¿Y por qué, digo yo, debe esa gallina andarse con esos cuidados y privilegios? Claro que también está bastante sola... aunque quizás espera algo o a alguien. O es la gallina de los huevos de oro. O se los apropiado indebidamente y se ha sentado encima para esconderlos.
¡Qué corral más raro, che! Por un lado están agrupados el burro/a, los corderos y una especie de cuervos de colores -digo, por las patas alambrosas, parecen cuervos, salvo el negro, bastante desapercibido por cierto, que miran con adoración a la Burra: justo el grupo de bichos que me parcieron sospechosos de esconder dobles intenciones o persoanlidades... Porque las caritas de esos pajarracos con picos de aristas afiladas que flanquean al cuervo no me convencen para nada. Y por otra parte, los gansos y las gallinas haciendo gala de una indiferencia rayana en la estupidez, (ay, pero no debo hablar así de animalitos de corral, che; es que tuve un día denso)
¿Y el abejorro ese, con cara de "me las sé todas pero mejor me callo?" jajaja.
¿Y esos dos enanos con gorros amarillos? No deberían estar allí, caramba, si no son bichos... Claro que también tienen caras de nabos escondedores. Este corral a simple vista, es armonioso, pero en tanto entras a detenerte en cada detalle, te digo que apesta, Marga, y no te enojes, ¿eh? Es más bien, antes que una feria de animalitos, un corral de confinamiento de los bichos junto con algunos trastos que se ven por allí... Ninguno parace reparar en que el corralito tiene una abertura hacia la derecha, y se mantienen allí, todos amontonados. finalmente, te digo, la más viva ahí es la gallina, por más malos que sean algunos. Está sentadita allí arriba, lejos de todo peligro y esperando ...¿qué, me pregunto, ya intrigadísima a esta altura, con tu corral...
La verdad, me he ido a cualquier parte con esta singular, bonita y colorida foto. Que cmo foto, es irreprochable. Ya sé ahora a quien encargarle la tapa de mi libro Turkesa. JAJA. Quedas contratada amiga.
ahh, saludos al comentarista precedente, me he carcajeado de lo lindo con sus reflexiones. JEJE.
Besotes a ambos.
Turke, ¡y con lo que te gusta a ti los animalitos…! Bueh, faltó el elefantito rosa por aquí, jejeje.
ResponderEliminarBueno, puede ser lo que dices, claro, se deben conocer desde hace tiempo, algunos son crías, debieron nacer al amparo del corral. Sabes… es cierto, no deben ser consciente de su acorralamiento, los animales de granja no lo son, quizá por eso mismo, porque nacieron allí y se sienten amparados. Quizá la libertad les dé miedo, porque son animales de granja.
Ay, señor, ¿conociste muchos burros en tu vida, hija? jajaja, mira que tienes cosas… Bueno, ¡el caso es que tienes razón!, el burro (o burra) no tiene la mirada abierta y clara que caracteriza a estos animales. Es cierto, tiene los ojos entreabiertos como con mirada astuta de zorro, uff, yo también empiezo a temer por ellos. Si a esto se le añade que según vio Lao ocupa demasiado espacio, cosa que luego me hizo recordar esto “Todos los animales son iguales, pero algunos lo son más que otros” (la primera parte era linda, pero muy utópica, así que alguien añadió la segunda en un arranque de sinceridad sin precedentes), de aquella inolvidable obra de Orwell, pues me dio qué pensar, uff. Así es, lo del burro/a está desproporcionado, amiga.
Los corderitos si son tiernitos y simpaticotes, siempre que no vengan disfrazados. Tú ya lo dices bien, los zorros y los lobos utilizan cada argucia… el cartel de Sinaloa no lo conocía, me tuve que ir derecha al amigo Google, y, jajaja, te digo que me partía de la risa, porque pensé que se trataba de un cartel publicitario o algo así. Pobre corderitos…o, mejor dicho, pobres de los animalitos ingenuos que caigan en sus fauces, si son como los del cártel ese…
Claro, la gallina no tiene nada de tonta, se pone a resguardo y a otear el horizonte desde lo más alto, porque algo no acaba de ver claro, será la mirada sospechosa del burro/a…a saber qué… El refrán dice, gallina prevenida vale por dos. Gallina en jefe, jajaja, no había pensado en eso, ni en los huevos de oro. Qué lindo cuento te salió. Me encantó.
Pues tienes razón, raro de narices… Y los picos de aristas afiladas siempre me levantan reservas. Será porque les tengo fobia a los pajarracos esos, es algo instintivo o atávico, en cuanto tengo uno cerca, aunque esté a la espalda en plan furtivo, la piel se me eriza y me da el cuerpo un respingo avisador. Bueno, hacen un grupete bastante sospechoso, sí. Ah, amiga, las gallinas, con mis respetos, son animales estúpidos, tampoco se le pueden pedir peras al olmo. Me acordé del cuento del pastor que tildaron de mentiroso (hoy dirían que paranoico) que avisaba de que venía el lobo, siendo estas falsas alarmas, hasta que cuando más desprevenidos estaban ¡zas! allí que les cayó. Porque el lobo actúa así, aunque venga con piel de corderillo lechón, está en su naturaleza. Vete a saber si el lobo no asomaba disfrazado las otras veces y el pastorcillo estaba en lo cierto y el muy malvado sólo quería dejar en ridículo al único que le había visto el plumero... en fin, acabaremos redescribiendo todos los cuentos.
Cómo voy a enojarme contigo, che. Nunca. Eso pasa con los corrales, amiga, cuando ves la imagen bucólica es una cosa, pero si te acercas un poco, apesta.
Bueno, bromas aparte me agradó mucho tu visita y ese pedazo comentario. Se ve que el mundo animal nos inspira mucho, ya estaba por proponeros a Lao y a ti que entre los tres podríamos hacer algún cuentito infantil o fábula con semejante granja. Y, ah, por favor, para mí será todo un honor y un gusto si una de mis fotitos adornan la portada de un libro tuyo, algún día. Prometo aplicarme todo lo que pueda :).
Besotes,
Margarita
Hola, Margarita. El blog de Conchi me ha traído al tuyo, quería agradecerte el comentario que me has dejado en el cuento de Blanca Nieves y su madrastra. nunca antes había pasado por aquí hasta ahora. Parece ser que tienes fotos muy divertidas según los comentarios que te han dejado, pero yo no puedo opinar sobre ese tema ya que soy invidente y mi ordenador solo lee el texto pero no las imágenes.
ResponderEliminarTe dejo un abrazo y algún día volveré a pasar. besos.
Piedad, muchas gracias por pasarte por mi blog. Bueno, todas las fotos no son divertidas, esta sí lo es, porque se trata de una exposición, a las puertas de una tienda, de animalitos para la decoración hechos de barro con una apariencia infantil y muy colorista. Hay un burro, ovejitas, patos y otros animales, vamos que parece toda una granja y aquí unos amigos se lo estaban tomando a guasa. Casi han hecho unos cuentos y todo.
ResponderEliminarBueno, si tu ordenador sólo lee textos te dejo un enlace de mi otro blog, uno en el que cuelgo cuentos y relatos que escribo cuando puedo, por si quieres pasarte por allí.
http://ladarsenademargarita.blogspot.com/
Un beso,
Margarita